La arquitectura universal busca crear entornos inclusivos y accesibles para la mayor diversidad de personas posible, promoviendo la igualdad de oportunidades y la participación de todos en la sociedad. Su valor radica en la voluntad de diseñar pensando en el otro, donde más que una infraestructura, es un servicio y medio de integración. Un universo de detalles basado en principios de accesibilidad, seguridad y comodidad para todos, independientemente de la edad, tamaño, capacidades o limitaciones. Es un recordatorio de que cada diseño lleva consigo el potencial de transformar vidas y abrir puertas a nuevas posibilidades que desafían no sólo las limitaciones tangibles, sino también emocionales y comunicacionales.
Evita las barreras físicas
Automatización o accionamiento fácil: Elige dispositivos automáticos como puertas con sensor de movimiento o manijas de fácil agarre y operación.
Superficies niveladas y antideslizantes: Trata de eludir los escalones, desniveles e irregularidades que puedan dificultar el desplazamiento de las personas, pero en casos inevitables y ante la necesidad de superar diferencias de altura, implementa ascensores o rampas que faciliten el acceso sin necesidad de asistencia.
Mobiliario flexible: Los muebles deben tener la capacidad de ajustarse, adaptarse y desmontarse para poder combinarlos y crear configuraciones específicas según las necesidades y usos requeridos.
Espacios amplios: Olvida los pasillos estrechos y las puertas reducidas que entorpecen el tráfico, y considera espacios abiertos que permitan mantener las áreas de circulación despejadas, fluidas y que proporcionen el espacio suficiente para girar.
Supera las barreras sensoriales
Iluminación adecuada: Utiliza una combinación de luz natural y artificial, evitando deslumbramientos y proporcionando una iluminación uniforme.
Aislamiento acústico: Incorpora materiales absorbentes de sonido, como paneles acústicos, alfombras y cortinas, para reducir la reverberación y el ruido ambiental..
Control de temperatura y filtración eficiente: Implementa sistemas de ventilación que permitan la circulación de aire fresco y la extracción de olores no deseados.
Contraste visual: Opta por combinaciones de colores en tonos suaves y naturales que generen un buen contraste entre elementos como paredes y puertas, o letras y fondos para facilitar la distinción y la lectura. Incorpora texturas que puedan ser percibidas a través del tacto, especialmente en superficies que se esperan utilizar o, incluso, texturas con patrones direccionales para guiar a las personas hacia áreas específicas.
Elimina las barreras cognitivas
Diseño intuitivo y de fácil comprensión: Se busca simplificar la disposición de espacios y minimizar los elementos que puedan obstruir la visión o crear confusión, permitiendo a las personas orientarse e interactuar de manera natural con el entorno.
Señalización clara: Con señales táctiles y audiovisuales que emplean símbolos universales, texto claro y ubicación visible y accesible.
Sistemas de audio: Implementación de audio descripciones y sistemas de amplificación que brinden información adicional a través del sonido.
Integración de lenguajes inclusivos: Mediante placas con inscripciones y planos en braille, carteles con instrucciones en lenguaje de señas y pictogramas luminosos y en relieve.
Créditos imagen de portada:
Fuente: https://www.self-build.co.uk/wp-content/uploads/2018/12/home-lift-ThyssenKrup.jpg